5 comentarios en «Restaurantes en San Andrés | La Regatta | TuTierra.net»
Venía con expectativas no muy altas pensando que era un restaurante de Instagram únicamente y realmente no lo es. Salí gratamente sorprendida al ver que la comida es muy rica. La carta es súper variada y platos fuertes van desde 60 mil a 180 mil aproximadamente. Bebidas variadas y entradas muy buenas.
El restaurante es amplio, bonito y atienden muy bien! Hay que llegar con reserva si o si. Aunque también hay lista de espera. Pero ideal hacer reserva
Por mejorar: el piso en la entrada y los postres.
Un par de puntos importantes:
1.- El lugar es hermoso por dentro y por fuera, rara vez tomo tantas fotos de la decoración y fachada
2.- La comida es increíblemente buena. No probé la langosta pero si probamos varios platillos de pescado y camarones.
Es un lugar para comer porciones bastante generosas con recetas *normales* con increíble sazón. Lo que quiero decir, es que hoy en día uno encuentra restaurantes con comida de autor, los cuales se enfocan en vender «experiencia» y comida deconstruida con recetas que nadie pidió. Este tipo de restaurantes de vez en cuando son buenos y en mi gusto, la gran mayoría de veces salgo con hambre, decepcionado y enojado por las cuentas elevadas.
La Regatta es costoso, sí… un plato fuerte puede rondar los $80,000-90,000 cop pero cada peso lo vale. Esta es la clase de restaurante de tradición que me gusta. Comida EXQUISITA, porciones bastas, ambiente agradable, decoración original y cálida, servicio eficiente y amigable.
Ordené un plato de arroz meloso con pescado, el cuál fue una experiencia embriagante de lo bueno que estaba, fue el mejor plato de la mesa de todo lo que ordenamos y compartimos. Recomendado ampliamente. El arroz estaba en su punto de cocción exacto y las especias jugaron excelente con el pescado ligeramente achichorranado y las especias, vegetales frescos, limón y yerbas.
Sinceramente, en San Andrés, encontramos restaurantes no tan ostentosos, donde se come mil veces mejor y mucho más barato.
Es cierto que; el lugar es muy bonito, y el ambiente es tranquilo y agradable. Ideal para ir en pareja. Pero, la comida y las bebidas, nos decepcionaron bastante para el precio que presenta.
Nosotros pedimos:
– Tiradito de Pecado: Plato muy ligero de comer, con bonita presentación. Pero, demasiado suave en sabor. Echamos en falta el cítrico y picante característico de la cocina Nikkei.
– Mar Derretido: Empalagoso, y mal equilibrado. Sabía más a queso que a marisco. Nada recomendable.
– Langosta Regatta: Fresca y tierna. Pero literalmente, las salsas destrozaron el producto. Demasiado fuertes para un ejemplar así. Le quitaron todo el protagonismo. Aunque, honestamente, la culpa es nuestra. Porque quisimos probarla así por recomendación de la mesera, al ser uno de los platos más demandados de la carta, y la verdad que fue la peor decisión que pudimos tomar. Si hubiera venido con un toque de limón, ajo o mantequilla fundida. Seguramente, hubiera sido un plato espectacular.
Respecto a las bebidas, estaban súper aguadas. Y la Soda, carecía fuerza el gas.
En cuanto al personal, nos atendió Diana. Y la verdad, fue muy amable a la hora de tomarnos la comanda. Pero, como mencionamos anteriormente, las recomendaciones no fueron buenas. Además, estuvo ausente en varios momentos, por lo que era difícil solicitarle alguna cosa. Aún así, no fue lo que nos molestó del servicio. Sino que la compañera que nos cobró, nos pasó 8€ de propina sin preguntarnos, y sin posibilidad de reclamo. Algo que nos sentó muy mal, porque debido a la experiencia que tuvimos, el importe nos pareció muy desproporcionado.
Sabemos que en Colombia cobran el 10% del total de la cuenta. Pero entiendan que, no es obligatorio pagarla. Es más, deberían preguntar al cliente si está de acuerdo o no con el servicio prestado. Porque en nuestro caso, no lo estábamos.
Igualmente, como dice el dicho: “Gustibus et coloribus non est disputandum”. 😉
Excelente servicio, la comida deliciosa la verdad vale la pena ir es un lugar espectacular, recomiendo ir de día porque se ve muy linda la vista del mar.
Fuimos con reserva previa.
Las vistas son a los barcos del muelle, esperaba unas vistas mejores.
La atencion del personal fue agradable y adecuada, aunque lo que se pedia tardaba muchisimo en llegar.
Tras 1h llegaron los entrantes, lo mejor, el ceviche. El pulpo estaba duro.
Los segundos platos estaban ricos, pero pedi un salmon en salsa teriyaki y vino con salsa agridulce color rojo… no era el plato que aparecia en la descripcion.
Para ser Colombia, aunque sea San Andres, me parecio caro, unos 45€ por persona con refrescos, cervezas y 1 postre a compartir (sin vino). No repetiria.
Venía con expectativas no muy altas pensando que era un restaurante de Instagram únicamente y realmente no lo es. Salí gratamente sorprendida al ver que la comida es muy rica. La carta es súper variada y platos fuertes van desde 60 mil a 180 mil aproximadamente. Bebidas variadas y entradas muy buenas.
El restaurante es amplio, bonito y atienden muy bien! Hay que llegar con reserva si o si. Aunque también hay lista de espera. Pero ideal hacer reserva
Por mejorar: el piso en la entrada y los postres.
WOW con este restaurante.
Un par de puntos importantes:
1.- El lugar es hermoso por dentro y por fuera, rara vez tomo tantas fotos de la decoración y fachada
2.- La comida es increíblemente buena. No probé la langosta pero si probamos varios platillos de pescado y camarones.
Es un lugar para comer porciones bastante generosas con recetas *normales* con increíble sazón. Lo que quiero decir, es que hoy en día uno encuentra restaurantes con comida de autor, los cuales se enfocan en vender «experiencia» y comida deconstruida con recetas que nadie pidió. Este tipo de restaurantes de vez en cuando son buenos y en mi gusto, la gran mayoría de veces salgo con hambre, decepcionado y enojado por las cuentas elevadas.
La Regatta es costoso, sí… un plato fuerte puede rondar los $80,000-90,000 cop pero cada peso lo vale. Esta es la clase de restaurante de tradición que me gusta. Comida EXQUISITA, porciones bastas, ambiente agradable, decoración original y cálida, servicio eficiente y amigable.
Ordené un plato de arroz meloso con pescado, el cuál fue una experiencia embriagante de lo bueno que estaba, fue el mejor plato de la mesa de todo lo que ordenamos y compartimos. Recomendado ampliamente. El arroz estaba en su punto de cocción exacto y las especias jugaron excelente con el pescado ligeramente achichorranado y las especias, vegetales frescos, limón y yerbas.
Sinceramente, en San Andrés, encontramos restaurantes no tan ostentosos, donde se come mil veces mejor y mucho más barato.
Es cierto que; el lugar es muy bonito, y el ambiente es tranquilo y agradable. Ideal para ir en pareja. Pero, la comida y las bebidas, nos decepcionaron bastante para el precio que presenta.
Nosotros pedimos:
– Tiradito de Pecado: Plato muy ligero de comer, con bonita presentación. Pero, demasiado suave en sabor. Echamos en falta el cítrico y picante característico de la cocina Nikkei.
– Mar Derretido: Empalagoso, y mal equilibrado. Sabía más a queso que a marisco. Nada recomendable.
– Langosta Regatta: Fresca y tierna. Pero literalmente, las salsas destrozaron el producto. Demasiado fuertes para un ejemplar así. Le quitaron todo el protagonismo. Aunque, honestamente, la culpa es nuestra. Porque quisimos probarla así por recomendación de la mesera, al ser uno de los platos más demandados de la carta, y la verdad que fue la peor decisión que pudimos tomar. Si hubiera venido con un toque de limón, ajo o mantequilla fundida. Seguramente, hubiera sido un plato espectacular.
Respecto a las bebidas, estaban súper aguadas. Y la Soda, carecía fuerza el gas.
En cuanto al personal, nos atendió Diana. Y la verdad, fue muy amable a la hora de tomarnos la comanda. Pero, como mencionamos anteriormente, las recomendaciones no fueron buenas. Además, estuvo ausente en varios momentos, por lo que era difícil solicitarle alguna cosa. Aún así, no fue lo que nos molestó del servicio. Sino que la compañera que nos cobró, nos pasó 8€ de propina sin preguntarnos, y sin posibilidad de reclamo. Algo que nos sentó muy mal, porque debido a la experiencia que tuvimos, el importe nos pareció muy desproporcionado.
Sabemos que en Colombia cobran el 10% del total de la cuenta. Pero entiendan que, no es obligatorio pagarla. Es más, deberían preguntar al cliente si está de acuerdo o no con el servicio prestado. Porque en nuestro caso, no lo estábamos.
Igualmente, como dice el dicho: “Gustibus et coloribus non est disputandum”. 😉
Excelente servicio, la comida deliciosa la verdad vale la pena ir es un lugar espectacular, recomiendo ir de día porque se ve muy linda la vista del mar.
Fuimos con reserva previa.
Las vistas son a los barcos del muelle, esperaba unas vistas mejores.
La atencion del personal fue agradable y adecuada, aunque lo que se pedia tardaba muchisimo en llegar.
Tras 1h llegaron los entrantes, lo mejor, el ceviche. El pulpo estaba duro.
Los segundos platos estaban ricos, pero pedi un salmon en salsa teriyaki y vino con salsa agridulce color rojo… no era el plato que aparecia en la descripcion.
Para ser Colombia, aunque sea San Andres, me parecio caro, unos 45€ por persona con refrescos, cervezas y 1 postre a compartir (sin vino). No repetiria.